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En 2016, Levi, el segundo hijo de Sarah Olson pasó por varias cirugías debido a unas complicaciones de una enfermedad llamada espina bífida. Después de cada una de estas cirugías, surgía un problema que extendía su estadía en el hospital. Le incrementaban los dolores e infecciones debido a la cateterización.
Sarah consultó a diferentes doctores e hizo su propia investigación para encontrar una solución par Levi. Pero rápidamente se dio cuenta que ningún dispositivo en el mercado podía ayudar a su hijo. El doctor de Levi le dijo a Sarah que, si quería una solución diferente, tendría que inventarla ella misma. Entonces Sarah hizo exactamente eso; y es así como LECS I fue creado.